Cuando nos acercamos al mundo de la inversión lo primero que nos viene a la cabeza es el riesgo. Queremos entender qué podría pasar con nuestro dinero en el peor de los escenarios con las diferentes inversiones a nuestro alcance.
Para ello es importante diferenciar los riesgos del producto en sí mismo (el fondo de inversión como vehículo) y la composición de ese fondo (dónde está el dinero).
De lo segundo ya he hablado alguna que otra vez. Ver aquí.
Lo que vamos a dejar claro ahora son los diferentes riesgos del fondo de inversión en sí mismo.
¿Qué riesgos tienen los fondos como vehículo de inversión?
Antes de nada hay que comentar que los fondos de inversión son un vehículo regulado por la CNMV, quien vela por el buen hacer de todos los actores implicados con el objetivo de proteger a los inversores.
¿Y quienes son los actores del fondo?
Una de las características más importantes y que más seguridad le da al vehículo es que ninguno de los intermediarios es, en ningún momento, propietario del dinero. El propietario del dinero siempre es el inversor final lo que da gran seguridad al inversor.
TÍPICAS PREGUNTAS.
¿Qué pasa con mi dinero si el banco quiebra?
Nada, no afectaría directamente al capital. Si quebrara la sociedad gestora, el comercializador o el depositario no afectaría al capital que se tiene invertido. Esto se debe a que el fondo no está dentro del balance de los bancos.
Un ejemplo cercano lo tenemos en la quiebra del Banco Madrid. Cuando quebró la entidad afectó a todos los posibles implicados, ya que en este caso el banco tenía gestora, comercializador y depositario. Cuando esto sucedió el regulador entró en juego y traspasó los activos a otra entidad, Cecabank y puso la gestión provisional de los vehículos en Renta 4. Como podemos ver la seguridad del vehículo es total.
El riesgo del capital únicamente se debe a las inversiones que realice el propio fondo de inversión (lo que hay dentro).
¿Los fondos de inversión también cubren hasta 100.000 € de capital?
Como podrás imaginar tras lo explicado anteriormente, los fondos NO entran dentro de esta cobertura, no tiene sentido si el dinero esta fuera del balance de los bancos.
Esto debería hacer que los inversores con más de 100.000 € en un banco reflexionen sobre dónde está más seguro su dinero, si en la cuenta corriente o en depósitos de un banco o en un fondo de inversión. Si hay quiebra o colapso del sistema, el dinero está más seguro en un fondo de inversión que en la cuenta bancaria, pero ya hablaré de esto en otra ocasión.
Por tanto, y como resumen, recalcar que no existe la posibilidad de que un fondo de inversión “quiebre”, ni de que desaparezca el dinero por arte de magia o el gestor se lo lleve para iniciar una nueva vida en una isla paradisíaca. No existen estas posibilidades.
Como hemos visto los fondos de inversión, como vehículo, gozan de una seguridad legal muy alta y nuestro capital está protegido ante diferentes sucesos que pueden preocupar a los ahorradores. De hecho, son bastante más seguros que muchos otros productos bancarios, o que el simple hecho de tener el dinero parado en la cuenta.
Los riesgos a los que esté expuesto nuestro capital dependen de la tipología de inversión que se lleve a cabo en el fondo de inversión.
¿Cómo eliminamos este riesgo? Ver más aquí